La gran sorpresa de la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos fue, sin duda, el cameo de la reina Isabel II. La monarca británica se prestó a participar en un montaje en el que hacía su entrada triunfal en el parque olímpico lanzándose en paracaídas con James Bond, interpretado por Daniel Craig. Desde entonces, el video se ha convertido en un hito en YouTube y son muchas las voces que incluso claman un Premio Oscar para la soberana.
La reina Isabel necesitó poco para ser persuadida de hacer su debut en el celuloide al aparecer junto al espía ficticio más famoso, James Bond, en la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos de Londres, según dijeron los organizadores.
"La reina se mostró encantada por la oferta y por estar involucrada en algo tan excepcional. "(Se sintió) muy contenta por participar, eran nuestros Juegos y la Reina estuvo encantada por ser parte de ellos", afirmó una portavoz del Palacio de Buckingham.
La monarca de 86 años también estuvo encantada de que sus dos perros corgis -"Monty", de 13 años, y "Holly", de nueve- tuvieran un protagonismo especial.
La representación de su épica llegada fue uno de los momentos más extravagantes de la ecléctica ceremonia del pasado viernes. La primera imagen mostraba a la reina sentada junto a una mesa en el Palacio de Buckingham, dando la bienvenida a Bond, interpretado por el actor Daniel Craig.
"Buenas noches, Sr. Bond", fueron las únicas palabras que pronunció la reina, dando la vuelta a su silla, ataviada con un vestido de un pálido color durazno. Ambos caminaban juntos hacia un helicóptero que estaba esperándolos en los jardines del palacio del centro de Londres, mientras ella parecía dejar a sus corgis en el umbral de la puerta.
El helicóptero cruzaba después la ciudad hasta que un hombre vestido de esmoquin saltaba del mismo en el Parque Olímpico en el este de Londres, seguido por una figura con un vestido color durazno. Acto seguido, la reina apareció inmediatamente en la tribuna principal frente a los 60 mil espectadores, sin el cabello despeinado, antes de tomar asiento.
Entre los defensores acérrimos de la idea se encuentra el cantante y actor Will Young, que también participó en la ceremonia. "La actuación de la reina fue brillante. Se merece un Óscar por esto. Un Óscar para la Reina por hacer de la Reina. ¿No sería impresionante?", declaró.
Gary Connery, a quien la fama le ha sobrevenido tras hacer de doble de la monarca, confiesa estar impresionado con el éxito que ha tenido lo que ya es un momento histórico. "Nunca pensé que el salto de la Reina iba a causar tanto impacto. ¡Menudo año!", dijo en la red social Twitter.
Gary Connery, a quien la fama le ha sobrevenido tras hacer de doble de la monarca, confiesa estar impresionado con el éxito que ha tenido lo que ya es un momento histórico. "Nunca pensé que el salto de la Reina iba a causar tanto impacto. ¡Menudo año!", dijo en la red social Twitter.
El presidente del Comité Organizador de los Juegos de Londres, el británico Sebastian Coe, fue el encargado de convencer a la reina Isabel II para aparecer en el filme junto al actor Daniel Craig, si bien "no necesitó mucha persuasión" para ello. "Creo que a ella realmente le gustó el concepto que creó Danny", añadió.
"Fue Sebastian quien habló con ella directamente. No necesitó mucha persuasión para convencerla", dijo la responsable de comunicación del Comité, Jackie Brock-Doyle.
Boyle, ganador de un Oscar al Mejor Director, rodó en el patio interior del palacio, la Grand Entrance, la East Galley, el Audience Room y la West Terrace, durante marzo y abril de 2012. "No tuve que decirle nada dos veces", dijo Boyle, citado por medios británicos. "Ella lo captó de inmediato, las cuestiones de cámaras y ángulos".
Su nada convencional aparición cinematográfica de la reina más famosa de todos los tiempos fue un tema destacado en los medios británicos. "Fue muy bien recibida, siempre supimos que así sería", señaló la portavoz del palacio. Cuando le preguntaron si podría ser la última aparición de la monarca en un filme, contestó: "Nunca digan nunca, pero tengan en cuenta que esta ha sido una actuación muy especial".
Lea además: Todas las noticias sobre la Realeza y los Juegos Olímpicos 2012
Boyle, ganador de un Oscar al Mejor Director, rodó en el patio interior del palacio, la Grand Entrance, la East Galley, el Audience Room y la West Terrace, durante marzo y abril de 2012. "No tuve que decirle nada dos veces", dijo Boyle, citado por medios británicos. "Ella lo captó de inmediato, las cuestiones de cámaras y ángulos".
Su nada convencional aparición cinematográfica de la reina más famosa de todos los tiempos fue un tema destacado en los medios británicos. "Fue muy bien recibida, siempre supimos que así sería", señaló la portavoz del palacio. Cuando le preguntaron si podría ser la última aparición de la monarca en un filme, contestó: "Nunca digan nunca, pero tengan en cuenta que esta ha sido una actuación muy especial".
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